Jueves europeo y noche grande, para hacer historia, como aquella de jueves de feria de hace ocho años en la que Antonio Puerta nos llevó a la gloria de Eindhoven. Aquí, esta vez, sólo era el partido de ida, habrá que esperar una semana.... pero se está más cerca de Turín. Buen resultado, quizá no tan buen fútbol como en otras ocasiones, pero lo que valía era sacar cuanta más ventaja mejor para ir a Valencia el primero de mayo.
Equipo de gala, el preferido de Émery (con las bajas de Coke y Alberto Moreno en los laterales), ante un Valencia crecido que dominó territorialmente en varias fases del partido, sobre todo al principio y al final. Acertado Beto que salvó dos goles cantados (uno con el 0-0), y casi perfecta la defensa sevillista, una vez más (flojeó la banda derecha de Diogo). Tardaron Mbiá y Carriço en hacerse con el centro del campo (sensacional, una vez más, el partido del portugués), y destacada primera parte de Reyes, que tomó el mando cuando Rákitic no podía y salió, una vez más, con el Sánchez Pizjuán en pie cuando fue sustituido.
Los primeros 15 minutos fueron de dominio valenciano, le costaba trabajo al Sevilla entrar en el partido, incluso Beto salvó el posible 0-1. Y llegó la jugada polémica, pasada la media hora: falta que saca el Sevilla, peina Carriço y Mbiá, en posición de fuera de juego, se revuelve y marca con el tacón. El línea se queda parado mirando al árbitro, el otro línea de fondo tampoco dice nada, Mbiá celebra el gol con sus compañeros y el árbitro concede el gol. Efectivamente, y no cuesta nada reconocerlo, gol que no debería haber subido al marcador, pero en fútbol, igual que existen otras circunstancias, existe el "error arbitral", y esta vez le fue favorable al Sevilla. Luego habría otros errores que favorecieron al Valencia, como el derribo a Bacca dentro del área o las claras manos de Fuego al chut de Gameiro que iba a gol: dos penaltis que, de haberse pitado, hubieran aumentado la ventaja sevillista. Errores arbitrales, como también existen los errores de los jugadores que fallan goles, se meten goles en propia puerta, o cometen acciones que dejan a sus equipos con uno menos. El fútbol sigue siendo humano, y los humanos siguen cometiendo errores.
Dicho esto, partido serio del Sevilla, lo más importante dejar la portería a cero. Aparte de un par de ocasiones claras del Valencia, atajadas por Beto, y un remate al larguero, el Valencia tampoco hizo muchas oportunidades de marcar. El Sevilla tuvo varios remates claros de Fazio, y otro en el descuento de Iborra, que pudieron ampliar la ventaja.
Noche de fiesta en Nervión, público entregado con el equipo, y colas, tras el encuentro, para pasar la noche en la taquilla por conseguir entrada para la vuelta.
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| Foto: Sevilla FC |
LA FICHA:
SEVILLA FC.:
13 Beto
02 Federico Fazio
03 Fernando Navarro
05 Diogo Figueiras
06 Daniel Carriço
09 Carlos Bacca (18 Kevin Gameiro, m73)
11 Iván Rákitic (c)
19 José Antonio Reyes (07 Marko Marin, m58)
20 Víctor Machín Vitolo (12 Vicente Iborra, m90)
21 Nico Pareja
40 Stephane Mbiá
Unai Émery
ÁRBITRO: Damir Skomina (Eslovenia). Protestado por ambos equipos, mala señal. Error grave al conceder el primer gol del Sevilla, en fuera de juego de Mbiá. También se "tragó" dos penaltis en el área valenciana, uno por derribo a Bacca, y otro por claras manos de Javi Fuego tras un disparo de Gameiro que iba a gol. La segunda parte, condicionado por el error de la primera, fue todo un recital de querer compensar al Valencia.
GOLES:
1 - 0, m 33: Remate de tacón de Stephene Mbiá, en fuera de juego en el segundo palo, tras peinar Carriço un saque de falta.
2 - 0, m36: Gran jugada, en pared, entre Vitolo y Carlos Bacca, que el colombiano finaliza batiendo al portero del Valencia.
INCIDENCIAS: Jueves 24 de abril de 2014. 21:05 horas. Estadio Ramón Sánchez Pizjuán, con unos 34.000 espectadores. Partido correspondiente a la Ida de las Semifinales de la Europa League.
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