Resultado soñado para dar un paso de gigante y poner un pie en la final de la Copa del Rey. Otra final al alcance de un Sevilla que sigue haciendo historia, y en el que se volvió a corear (es justo) el nombre de Unai Émery. Partizado, que sin embargo no llenó el Sánchez Pizjuán, quizá porque nos estemos acostumbrando a jugar semifinales (cuatro años seguidos, y muchas en la última década). Ambiente espectacular, con las bufandas que el club regaló a todos los asistentes al encuentro, y con las que se volvió a dar un colorido especial como sólo sabe hacer la afición de Nervión. Impresionante la salida del equipo con el himno de Javi El Arrebato, de pelo de punta. Y con esa afición, un equipo lanzado que no podía fallar... pero ante un muy buen rival que en liga fue el último en ganar en el Sánchez Pizjuán (ya hace una vuelta).
Primeros compases de respeto de ambos equipos, de tu a tu, con alguna ocasión y hasta lanzamientos al palo de los vigueses. Mucho respeto y partido bonito.
Casi llegando a la media hora el Sevilla ya se hizo dueño del partido, con ocasiones claras de cabeza de Kolo y Nzonzi, y la gran oportunidad del penalti para abrir el marcador, pero Rubén Blanco adivinó la intención de Kevin Gameiro, que empezó mal una noche que para él sería mágica.
El Sevilla buscaba abrir la lata, pero sin desconfiar la labor defensiva, era primordial mantener la portería a cero para la vuelta en Vigo. Y fue al borde del descanso cuando Adil Rami marcó de cabeza en un saque de esquina de Banega. 1-0 al descanso.
La segunda parte siguió de respeto, el Sevilla esperaba con paciencia que el Celta buscara la portería de Rico, un Sevilla muy serio en defensa, y supo perfectamente aprovechar esas contras que podrían abrir la brecha. Y de qué manera.... en prácticamente cuatro minutos Kevin Gameiro explotó su velocidad y se puso de nuevo mano a mano con Rubén Blanco, sacándose doblemente la espina del penalti de la primera parte. Delirio en Nervión, Monsieur Gameiro ponía el partido 3-0 y la eliminatoria muy en franquicia para el Sevilla.... la final más cerca. Explosión de júbilo en un sevillismo que se ve, de nuevo, con la oportunidad de luchar por un título. Pero había más. Otra contra, con un Celta ya grogui, y esta vez fue el ex celtiña Krohn-Delhi quien se plantó sólo ante un desesperado Rubén, para certificar el 4-0 con el que se terminó el partido y la fiesta sevillista en Nervión.
Ahora partido de liga, otra vez con el Celta, y el próximo jueves a plantar cara en la vuelta, con mucha ventaja, para hacer grande al Sevilla FC con una nueva clasificación para la final de la Copa del Rey. Muy cerca de volver a hacer historia.
Foto: LaLiga |
LA FICHA:
SEVILLA FC:
01 Sergio Rico
02 Benoit Tremoulinas
03 Adil Rami
05 Timothée Kolodziejczak
07 Michael Krohn-Delhi
09 Kevin Gameiro (24 Fernando Llorente, m80)
14 Sebastián Cristóforo (06 Daniel Carriço, m70)
15 Steven Nzonzi
19 Éver Banega (22 Yevhen Konoplyanka, m74)
20 Víctor Machín Vitolo
23 Coke Andújar (c)
Unai Émery
RC CELTA:
13 Rubén Blanco
02 Hugo Mallo (c)
06 Nemanja Radoja
08 Pablo Hernández
09 Iago Aspas
11 John Guidetti (12 Claudio Beauvue, m78)
14 Orellana
18 Daniel Wass (05 Marcelo Díaz, m84)
19 Jonny Castro
20 Sergi Gómez
22 Cabral
Eduardo Berizzo
ÁRBITRO: Carlos Clos Gómez (Colegio Aragonés). Mostró tarjetas amarillas a Iago Aspas (m21), Sergi Gómez (m27), Wass (m38), Rami (m52), Krohn-Delhi (m57), Radoja (m81), Llorente (m82), Coke (m83). Sin problemas por la contundencia del marcador, pero sí algo riguroso en las tarjetas.
GOLES:
1 - 0, m44: Saque de esquina de Banega y Adil Rami marca de cabeza.
2 - 0, m59: Contra del Sevilla, pase de Krohn-Delhi para Kevin Gameiro que se va de su marca por velocidad y se pone mano a mano para batir al portero.
3 - 0, m62: Pase sensacional, ahora de Banega, y otra vez Kevin Gameiro se va por velocidad y bate a Rubén mano a mano.
4 - 0, m87: Otra contra del Sevilla, ahora es Michael Krohn-Delhi que se queda sólo ante Rubén, para marcar y sentenciar.
INCIDENCIAS: Jueves 04 de febrero de 2016. 20:30 horas. Estadio Ramón Sánchez Pizjuán, con unos 37.000 espectadores. Partido correspondiente a la ida de las Semifinales de la Copa de Su Majestad El Rey. En el minuto 28, Kevin Gameiro falló un penalti, que paró Rubén Blanco.
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